domingo, 20 de abril de 2008

LA MENTE ES COMO UN ICEBERG



La mente es como un iceberg, existe una porcion visible, el conciente
y otra oculta, mucho mayor, el subconciente.
Nuestra mente subconciente es responsable de buena parte de los
exitos y fracasos que logremos en la vida.

Muchos de nosotros presentamos patrones de vida recurrentes,
una experiencia pasada, o un mismo comportamiento, se manifiestan
una y otra vez. El hecho de que ciertas conductas nuestras se repi-
tan todo el tiempo, se debe al subconciente.

Nuestro estado de salud es determinado por nuestros programas
mentales, que nos dicen quienes somos y qué nos pasa.

La vida cambia cuando nosotros cambiamos.

Sea cual fuere el punto en que te encuentres actualmente, puedes
lograr lo que desees.

Siempre que decidimos cambiar enfrentamos resistencia.

Siempre surgira el reto contra el que se mide la seriedad de nuestras
intenciones.

Desde el momento de nacer desarrollamos patrones de conductas.
Cuando eramos bebes, llorabamos por muy diferentes razones y en
muchas ocasiones, se nos daba de Comer.
De manera tal que se establecio una asociacion segun la cual la
solucion a nuchas situaciones era Comer.
Es por eso, cuando te sientes fustrado, solo o deprimido, una de las
principales luces que iluminan tu vida es la luz del refrigerador.

Nuestro comportamiento actual es resultado de las experiencias
adquiridas en la infancia.
De manera subconciente creamos en nuestras vidas patrones que
reflejan nuestra experiencia al lado de nuestros padres.
La calidad de nuestra relacion con nuestros padres crea su propio
patron. Si de niños esperimentamos culpa y desaprobacion,
nuestra tendencia sera atraer personas que nos traten como
"indeseables". En cambio, si de niños hemos experimentamos cariño
y aprobacion, al llegar a la edad adulta gravitaremos en torno a per-
sonas que nos traten con respeto. Atraemos lo que esperamos y el
mundo nos trata como creemos merecer que se nos trate.

No tenemos porque resignarnos a vivir siempre con nuestros actuales
patrones de comportamiento.
Los patrones negativos oponen siempre resistencia, pero no son inven-
cibles.

Debes pensar siempre positivamente en ti mismo y en tu situacion.

Procura hablar siempre bien de ti mismo e imagina que tu vida funciona
como tú lo deseas. Asi crearas nuevos patrones de felicidad.


Extraido de la Web