lunes, 30 de marzo de 2009

FUERZAS DEL UNIVERSO


Usted tiene la capacidad para encontrar su parte invisible, usar su mente a su antojo y reconocer aquello que conforma su naturaleza humana. Su dimensión humana no se refiere a una forma o un cuerpo, sino a alguno mucho más trascendental, guiado por unas fuerzas del universo que están siempre en funcionamiento.

Toda creación humana comienza con un pensamiento, una visión, una imagen mental. Su capacidad de pensar no tiene límites. Crea que usted es un alma acompañada de un cuerpo en vez de un cuerpo dotado de un alma. Usted creará para sí una vida sin limitaciones. Empezará a ver milagros desde que cree en ellos y confía en que se hagan realidad. Usted mismo se convertirá en un hacedor de milagros.

He llegado a saber que existe una inteligencia invisible, intocable, imperceptible y sin embargo muy real, detrás de, o apoyando, toda forma. A esta inteligencia se le ha designado con muchos nombres. Algunos la llaman Dios, otros fuerzas de la vida, conciencia superior, espíritu divino. El nombre no importa; su existencia, por el contrario, sí.

Mis circunstancias no me hacen ser el que soy, sino que tan sólo revelan lo que he elegido ser. Cuanto más tranquila está mi mente, más percibo el lazo de unión que existe entre mis pensamientos y mi modo de sentir y menos tiendo a ser crítico y negativo.

Cuando usted juzga a una persona, no la está definiendo a ella sino a usted mismo. El juicio crítico no dice nada sobre la persona juzgada; sólo expresa que usted necesita juzgarlo de la manera en que lo está haciendo. Por tanto, está hablando más de usted mismo que del otro y puede significar que se está identificando de alguna manera con la persona juzgada.

Lo que más nos molesta de los demás es algo que con frecuencia nos negamos a admitir en nosotros mismos, o incluso algo de lo cual pedimos más.

Nuestro futuro está constituido por los pensamientos que tenemos con mayor regularidad. Nos convertimos literalmente en lo que pensamos y contamos con el don de poder escribir nuestra propia historia.

No hay un camino hacia la felicidad, la felicidad es el camino.

En un universo en que el tiempo no existe, usted puede encontrarse con cualquier cosa que desee. La oportunidad de hacer que el pensamiento se convierta en realidad física depende de usted. La realidad física ya está aquí y su trabajo como visualizador consiste en aprender a llevar el mundo abstracto del pensamiento al mundo físico de la forma.

Cada cosa es energía. Nada es sólido. Todo oscila en su propio nivel de realidad. La energía es la sustancia del universo y los pensamientos son parte de esa sustancia. Cuando usted piensa en algo que le gustaría que le sucediera, la clave consiste en sintonizar la dos frecuencias para que todo se convierta en realidad.

Aquello en lo que usted concentre sus pensamientos se expande; aquello en lo que suele pensar más acabará siendo lo que usted elija para ampliar. Todos actuamos según las pautas de nuestros pensamientos y los mismos se convierten en nuestra experiencia diaria.

Nuestra capacidad para disfrutar de la vida procede de nuestra manera de procesarla, y no de la influencia de factores externos. Nada exterior tiene la capacidad de crear felicidad o plenitud en nosotros. Lo que determina la calidad de nuestra vida es nuestra decisión de sentirnos satisfechos o no, basada en nuestra forma de pensar, de vernos y de situarnos en el universo.

Por consiguiente, si usted necesita mucho más para sentirse completo, entonces aunque reciba mucho más, siempre se sentirá insatisfecho.


Cuando la mente del hombre se abre a una nueva idea, nunca vuelve a su dimensión anterior.

Extraido de la Web.Angeles Amor

miércoles, 18 de marzo de 2009

EL VALOR DE LA LIBERTAD




Se gana y se pierde, se sube y se baja, se nace y se muere.

Y si la historia es tan simple, ¿por qué te preocupas tanto?.

Tienes el poder para ser libre en este momento, el poder está siempre en el presente porque toda la vida está en cada instante.

No digas «No puedo» ni en broma, porque el inconsciente no tiene sentido del humor, lo tomará en serio y te lo recordará cada vez que lo intentes.

Culpar a los demás es no aceptar la responsabilidad de nuestra vida, es distraerse de ella.

No te quejes, recuerda que naciste desnudo, entonces ese pantalón y esa camisa que llevas ya son ganancia.


Extraido de la Web por Facundo Cabral

jueves, 5 de marzo de 2009

LA LUCHA INTERIOR

Habia una vez un viejo ermitaño, es decir, una de esas personas que por amor a Dios se refugian en la soledad del desierto, del bosque o de las montañas para solamente dedicarse a la oración y a la penitencia.

Se quejaba muchas veces que tenía demasiado que hacer.

La gente le preguntó cómo era eso de que en la soledad estuviera con tanto trabajo.

Entonces les contestó:

"Tengo que domar a dos halcones, entrenar a dos águilas, mantener quietos a dos conejos, vigilar una serpiente, cargar un asno y someter a un león".

No vemos ningún animal cerca de la cueva donde vives. ¿Dónde están todos estos animales? Entonces el ermitaño dio una explicación que todos comprendieron. Porque estos animales los tienen todos los hombres, ustedes también.


Los dos halcones, se lanzan sobre todo lo que se les presenta, bueno y malo. Tengo que domarlos para que sólo se lanzan sobre una presa buena,




Las dos águilas con sus garras hieren y destrozan. Tengo que entrenarlas para que sólo se pongan al servicio y ayuden sin herir, son mis dos manos.





Y los conejos quieren ir adonde les plazca, huir de los demás y esquivar las cosas difíciles. Tengo que enseñarles a estar quietos aunque haya un sufrimiento, un problema o cualquier cosa que no me gusta… Son mis dos pies.





Lo más difícil es vigilar la serpiente aunque se encuentra encerrada en una jaula de 32 varillas. Siempre está lista por morder y envenenar a los que la rodean apenas se abre la jaula, si no la vigilo de cerca, hace daño, es mi lengua.






El burro es muy obstinado, no quiere cumplir con su deber. Pretende estar cansado y no quiere llevar su carga de cada día, es mi cuerpo.





Finalmente necesito domar al león, quiere ser el rey, quiere ser siempre el primero, es vanidoso y orgulloso… es mi corazón.



´De acuerdo a cómo luchemos, al empeño que pongamos, dominaremos lo mejor que hay en nuestro interior, y así seremos hombres para el bien.



Extraido de la Web Autor desconocido
Publicado por M.Arcel